Page 362 - Antologia FONCA 2017_sp
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IVÁN LOWENBERG SAINZ
Filemón: Hola, campeón.
Juan Filemón: (Entusiasmado.) ¡Hola, papi!
Filemón le da un beso en la frente y prosigue a saludar a su es
posa, pero ella lo detiene con la mirada hostil.
Amelia: Filemón, ¿dónde estuviste todo el
día? Me habló mi primo que otra vez no te
presentaste en la planchaduría a trabajar.
Filemón se detiene un breve instante, pero siente tener una gran
respuesta.
Filemón: Amor, pero hoy ayudé a la policía
a atrapar un ladrón, hasta tenía apodo, El
Robamelones…
Amelia: ¡Pues aunque fueran mangos, ya
has dejado a todos mis primos plantados,
ya no les puedo seguir pidiendo que te con-
sigan trabajo!
Inés: (Desde el fondo.) ¡Nos va a dejar de
hablar toda la familia!
Sra. Chata: (Haciéndole coro a su hija casi
de forma automática.) ¡Bueno para nada!
Juan Filemón: (Volteando a ver a su abue
la.) ¡Pero atrapó a un ladrón, abue!
Inés: ¡Usted no ande opinando, Juan File-
món!
Sra. Chata: (En coro tras Inés.) ¡No sea
metiche, niño!
Inés se levanta y toma a Juan Filemón del brazo para llevárselo
al sillón de la sala. Tanto ella como la Sra. Chata le murmuran
algo a regañadientes, siempre en forma de coro y complementando
los regaños. Filemón mira a Amelia buscando comprensión.
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