Page 407 - Antologia FONCA 2017_sp

DRAMATURGIA

*

Tomás lavándole los pies a la abuela.

Ronie: Abuela…
Filipina Hortensia: ¡Largo!
Ronie: ¿Qué sucedió?
Tomás: Siempre salimos de buenas y regresamos de malas.
Filipina Hortensia: Lávame los pies, ¡más!, vamos tállame, ¡tá-

llame!… Todo lo que se pueda, Tomasito, quiero que mis pies
queden impecables, como los de una joven, ¡puta madre!
También córtame las pesuñas, ¿ves? ¡No me alcanzo!
Tomás: Es mejor si vamos a que alguien le haga pedicure.
Ronie: ¿Qué sucedió?
Tomás: La abuela se enojó.
Ronie: Qué raro, ¿y ahora con quién?
Filipina Hortensia: Estoy enojada con mis pies.
Tomás: Necesitaban doce hombres para hacer la representación
de Jesús lavándole los pies a sus doce apóstoles. Pero sólo
éramos once, faltaba quién representara a Santiago y ninguna
mujer lo quería hacer.
Filipina Hortensia: Todos los hombres de esta colonia estaban
haciendo fila en la maldita empresa del diablo, como si ser
congelados les fuera a purificar el alma. ¡Ah!, pero cuando se
mueran quiero escucharlos desde el infierno gritándome que
les remoje un poco la boca con mi saliva, y yo miraré hacia el
piso y les diré: ¿pero querían congelarse y ser eternos, no?
¡Cabrones, tomen un poco de esto! (Escupe al suelo.)
Tomás: Así que la congregación votó unánimemente porque la
abuela representara a Santiago por ser la más afecta y cercana
al templo…
Filipina Hortensia: ¿Unánimemente? Me obligaron a sentarme
allí a la fuerza.
Tomás: … entonces, la abuela representó al apóstol sentada en
una silla con sus pies al desnudo, y así como Jesús hizo, el
padre Harris lavó los pies a la abuela.

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