Page 411 - Antologia FONCA 2017_sp
P. 411
DRAMATURGIA
pero indispensable.
¿Podrías abrir la puerta del teatro?
2. Todo lo vivo tiene fecha de caducidad
Ocho mujeres diversas, por no decir deformes, esperan pacientes
a los espectadores. Lo que hacen para lidiar con su expectativa
poco importa: todos son lugares comunes. Se mantienen al mar
gen de la luz. Una de ellas, que quizás esté fumando, apaga su
cigarrillo y se dirige al centro del espacio. Comienza a bailar en
medio de una nube de humo. Su coreografía es sencilla y fá
cilmente replicable, del tipo que se baila en bodas, festivales del
día de la madre o desfiles militares. Las demás se incorporan al
baile, danzan sin tregua, hasta que el desgaste se muestra desca
rado en sus cuerpos. Cuando la música cesa y el ambiente queda
cargado de sus jadeos, una de ellas se acerca la butaquería e in
tenta desafiar el cansancio con su voz.
Una que habla primero: Esto es un intento.
Éstas somos, esto es todo lo que podemos ser.
Hacemos esta obra conscientes de su inutilidad.
La niña pequeña: ¿De qué sirve, en un mundo como el nuestro,
remar contra la marea?
La mujer cana: Pero aquí estamos. Eso ya es bastante.
La botarga en forma de casa: Tenemos buenas intenciones,
lo juramos.
La de mirada convexa: Hoy queremos lograr una sola cosa.
Algo simple pero que no es sencillo.
Acotaciones: Se hace un silencio. Siete mujeres no saben qué
decir. Asumir la incertidumbre que causa depender de los de-
más nunca es fácil. Tienen que admitir ante los espectadores
que sin ellos no hay forma de lograr lo que desean.
La mujer cana, que esperaba que alguien más tomase las riendas,
se desespera y lo hace. Sale brevemente del escenario y regresa
con un micrófono que conecta a un pequeño amplificador.
412